Hoy en día, una de las mayores molestias a las que se enfrenta una ciudad es la publicidad de las comunidades; día tras día, los buzones se llenan de un montón de documentos que en la mayoría de las ocasiones no son importantes para el destinatario; por lo que acaban en la basura o en el suelo. Es más, a veces son un estorbo para otras cartas, papeles o documentos que son importantes e interesantes.
Mi idea es incorporar en la entrada de cada edificio un PC, de uso comunitario, con múltiples funciones:
-Albergar publicidad: los supermercados, en vez de inundar buzones con folletos y papeles, dejan en formato digital esa publicidad en un ordenador; de forma que el que quiera consultarlo lo descarga, y el que no, no tiene que pelear con toneladas de papel desperdiciado.
-Comunicados de la Comunidad: Si el tablón que tiene la comunidad no da abasto, o hay que quitar actas de reuniones anteriores para poner nuevas, estas pueden guardarse en el PC, para consulta de cualquier vecino (se archivarían en formato "solo lectura", para evitar manipulaciones inapropiadas).
-Comunicados locales, municipales o regionales: aunque una función principal es evitar publicidad, otra también es facilitar a organismos gubernamentales y administrativos transmitir información útil y necesaria a sus ciudadanos, que de otra forma no se consultaría (por estar poco anunciada debido al execesivo gasto en papel y tinta o porque de tantas publicaciones que hay la gente desiste de consultarlas). Dichos comunicados se organizarían para simplificar su consulta (documentos referidos a la comunidad y el ayuntamiento/fiestas/subvenciones/actas y bandos/...). Estos archivos también serían de "solo lectura".
En vez de tener que imprimir, por ejemplo, 10000 carteles sobre un bando, un edicto o una fiesta local, se podría reducir ese número y ampliar el número de copias digitales (así cada comunidad con ordenador tendría toda la información y no se la perdería).
-Dado a que es un PC, puede usarse como un PC: aunque son pocos los casos, un porcentaje considerable de la población no tiene ordenador, y para tareas simples como enviar un correo o consultar un periódico, puede que necesite ir a un telecentro; implementando ordenadores en cada comunidad, los telecentros se saturarían menos y podrían dar más servicios, aparte de que mucha gente en vez de ir a un telecentro (que le puede quedar lejos), puede acceder a un ordenador en su mismo edificio. También puede utilizarse como "foro" de la comunidad, si alguien deja una consulta o una propuesta guardada en el ordenador, el resto de la comunidad puede responderle en cualquier momento (sin tener que realizar una reunión expresa para ello).
Financiación: Intentar poner un ordenador en cada edificio (o en la mayoría) parece tarea complicada, pero en realidad es sencillo e incluso económico. Existen cuatro posibilidades:
-Que lo financien los supermercados/hipermercados/grandes superficies: es lo más lógico; si estas empresas son las que más inundan los buzones con publicidad y de las que más beneficiadas van a salir cuando se implementen los ordenadores, deberían financiarlos ellos (como se ve en el vídeo explicativo, les es mucho más barato comprar ordenadores que imprimir folletos).
-Que lo financie la comunidad: pese a todo, también podría financiarlo la propia comunidad sin perder un ojo de la cara. Para un edificio con diez plantas y cuatro viviendas por planta, son 40 hogares; si suponemos que 35 están ocupadas, el coste por vivienda sería de unos 3,5 € cada 3 años, un coste más que asumible.
-Que lo financie el ayuntamiento: este caso sería remotamente remoto, porque lo más normal sería que el coste lo asumieran o las grandes superficies o la comunidad; aún así el ayuntamiento podría impulsar esta idea financiando algunos ordenadores (para una calle convencional, con unos 20 edificios, se podrían surtir de ordenadores durante 3 años por 2400 euros, un importe relativamente bajo para un ayuntamiento (supongo)).
-Que lo financien los tres mencionados anteriormente en parte: de esta manera el coste de cada uno sería aún menor.
En resumen, esta idea es rápida (puede aplicarse en pocos días), fácil (sólo requiere un ordenador y convertir los folletos, actas, edictos, bandos, pancartas y archivos en formato digital, que suele ser el formato en el que se crean) y barata (las grandes superficies, comunidades de vecinos y organizaciones administrativas ahorrarían costes en papel y tinta; y los vecinos ahorrarían un preciado tiempo en quitarse folletos que no les interesan de sus buzones).
Esperando que esta idea no se quede en meras líneas escritas, un saludo.