Si, como parece, se peatonaliza el tramo de la Calle Cádiz que va desde Lealtad hasta el Bahia por el proyecto BOTIN y cierre, por consiguiente, de la circulación de vehículos en dicho tramo, quedará al DESNUDO el enorme muro que bordea el claustro de la Catedral en la Calle Cádiz.
Ocasión de oro para revalorizar esa muralla tan alta, que hace un efecto barrera espantoso y más cuando se peatonalice, colocando un amplio ascensor panorámico acristalado que suba o baje cada vez a un grupo numeroso de visitantes desde la acera de la Calle Cádiz hasta la terraza que da entrada al claustro de la catedral. Se facilitaría el acceso a personas discapacitadas ( con algunas medidas complementarias más, escaleras, etc..) y se facilitaría el acceso al monumento más antiguo de Santander ( origen de la ciudad ) a todo el mundo, visitantes y locales.
Saludos.